Descalza


Deambulo en mi habitación como una loca.
Veo a mi triste sombra seguir inútilmente mis pasos.
La sorprendo besándome el tobillo.
Y por un momento, me río de mí misma
mientras continúo mis pasos sin sentido.

viernes, marzo 21, 2014



me regalas  tus dedos


(y yo unos labios cansados con los que jugar).




Tú me regalas ojeras,
sandalias con tacones en invierno
y un colchón


que no se puede estrenar.


(octubre 2013)