.
Hacía meses que no me disfrazaba de ejecutiva agresiva, pero hoy necesitaba combinar la fachada con el color descalzo de mis uñas y la coraza desangrada de mi mirada. Así que las horas han ido avanzando en el segundero de mi reloj al ritmo firme de mi taconeo. (Moraleja; un cm de altura extra no basta para amortiguar el eco torpe de los latidos perdidos.)
Hacía meses que no me disfrazaba de ejecutiva agresiva, pero hoy necesitaba combinar la fachada con el color descalzo de mis uñas y la coraza desangrada de mi mirada. Así que las horas han ido avanzando en el segundero de mi reloj al ritmo firme de mi taconeo. (Moraleja; un cm de altura extra no basta para amortiguar el eco torpe de los latidos perdidos.)
<< Descalza