Descalza


Deambulo en mi habitación como una loca.
Veo a mi triste sombra seguir inútilmente mis pasos.
La sorprendo besándome el tobillo.
Y por un momento, me río de mí misma
mientras continúo mis pasos sin sentido.

lunes, diciembre 13, 2004

(...)



Cuando
las patadas, asustadas, rebotan en mi bajo vientre,
buscar abrazos en 15 metros cuadrados se reduce a:

cruzar con más fuerza
la chaqueta de lana sobre mi pecho...

(Me da miedo que llegue mañana.)