Descalza


Deambulo en mi habitación como una loca.
Veo a mi triste sombra seguir inútilmente mis pasos.
La sorprendo besándome el tobillo.
Y por un momento, me río de mí misma
mientras continúo mis pasos sin sentido.

domingo, julio 25, 2004

Estas horas en las que no miento..

Ha vuelto a pasar, aunque me lo prohíbo cada viernes, aunque lo niegue cada lunes y el miércoles acabe creyéndome lo que aparento. Me he inyectado en vena otra sobredosis de siesta. Y no hablo de dormir de tres a cinco. Ni tan siquiera hablo de dormir.